28/05/2025

Graffiti, de Unsuk Chin, estreno en el Festival Resis, en el Palacio de la Ópera de A Coruña

 Palacio de la Ópera, A Coruña


Fabián Panisello
dirigirá a la OSG en el Palacio de la Ópera de A Coruña, dentro de las actividades del VIII Festival Resis, reservándonos en programa el estreno de Graffiti, de Unsuk Chin, junto a Metástasis de Iannis Xenakis y Tramuntana, de Gabriel Erkoreka- día 30, a las 20´00.-, un director prestigiado por sus labores con el Plural Ensemble, al que seguimos en propuestas como Poñer o foco, en las Xornadas de Música Contemporánea de 2022, este argentino destaca igualmente por su presencia en distintos países europeos y citas como las de la Fundación BBVA, siendo al tiempo profesor en la Escuela Reina Sofía y en el China Conservatory. Fue compositor en residencia de certámenes y academias como las que se convocan en Graz, Nueva York, Buenos Aires, Beijing, México o Leuk (Suiza). Tuvo como maestros a Francisco Kröpfl y Julio Vera, en Buenos Aires y a Boguslav Schaeffer, en el Mozarteum de Salburgo, completando experiencias como Elliot Carter, Franco Donatoni, Brian Ferneyhoug, Peter Eötvös o Luís de Pablo, recibiendo galardones como el Mozart Erben (Salzburgo), el Würdigunspreis (Austria) o el Rodolfo Halffter (México), entre importantes encargos recibidos de instituciones como Alte Oper Frankfurt, Festival  de Donaueschingen, Teatros del Canal, y de su ámbito creativo merecen mención Le Malentendu, para el Teatro Colón (Buenos Aires), obras de cámara para el Cuarteto Arditti o Ensemble Modern; Les Trois Mages, coproducción con la Fundación Ernest von Siemens, para un apartado del que queda constancia a través de las productoras NEOS; Col legno; Cypres; Columna Música o Verso.

Iannis Xenakis- Metástasis-, raíces griegas y asentamiento parisino y que llamaría la atención precisamente desde composiciones como Metástasis, tras su estreno en 1953, dignificada en su planteamientos estéticos por resultar especialmente atronadora, en sus anclajes definidos por una precisa organización de las masas de sonidos que, desde una perspectiva propuesta quedará asociada a los patrones de Gÿorgy Ligerti- Atmosphères-, resultando una obra de complejidad polifónica opuesta a determinismos marcados por la percepción puntillista de la pujante impronta serial, la misma que obliga a distinguir la sucesión de notas independientes. Xenakis, autor también de Lontano, guarda en mente el fluir de los sonidos llevados aspectos casi imperceptibles. Metástasis, definida por una partitura en forma de gráfico, es objeto de un destino que sugiere al oyente una actitud que se avenga a la totalidad del espacio sonoro, abriendo con ella un posicionamiento que como respuesta, tuvo una aceptación inmediata y que en el entorno de sus parámetros, pretende el reconocimiento de claros efluvios de mediterraneidad, que por detalles imaginables, nos traslada a la imaginaria sensibilidad de los ancestrales mitos griegos. El juego de alternancia de tensiones, remite a tales patrones entre la claridad y las penumbras. Una música que ahonda en esas tensiones, remarcadas por los aspectos tímbricos en manos del grupo instrumental alcanzando por necesidad el límite de esas posibilidades que nos cercan en un intenso estado ferviente a la búsqueda de ese imaginario fuego latente. Olivier Messiaen, su maestro, será fundamental dentro de esa evolución en el espíritu de las vanguardias, ya posicionado como creador que también sabrá acercarse al arquitecto Le Corbusier, con quien colaborará en el Pabellón Philips, de la Exposición Universal de Bruselas, el mismo en el que Varese estrenará su Poème électronique.

Unsuk Chin- Graffiti, en estreno- compositora coreana que recientemente presentó Súbito con forza-, en estudios en la escuela de Gÿorgÿ Ligeti, en Hamburgo y especializada en músicas electrónicas y acústicas, con obras que han merecido la atención la O. S. de Chicago, la O.S. de Los Ángeles o la O. F. de Berlín, recibiendo galardones como el Grawemmeyer Prix; el Premio Arnold Schönberg, el Wihuri Sibelius, el Ernest von Siemens, el Musical Léonie Sonning, destacando en su producción por obras como el Concierto para violín y orquesta; Acrostic- Worldplay, para soprano y grupo instrumental; Alice in Wonderlad, ópera en ocho escenas, trabajando en un lenguaje cercano al oyente y en el que destaca el uso de una instrumentación cuidada en cuanto al color ofrecido por los instrumentos; juegos de luces, una belleza abstracta, una escucha fluida y una grata amabilidad, fruto de los resultados compartidos como artista en residencia de La O. Filharmónica de Seul, en la que promovió el Departamento de Música Contemporánea. En ella encontramos una confluencia de influencias orientales y occidentales, en las que tienen cabida Toshio Hosokawa (Japón) y Wenchen Qin (China) además de lo magiar de Ligeti, durante tres años, dentro de una exasperante convivencia, apartándose de las exigencias de las urgencias postseriales que bien podrían defender alumnos del círculo de Darmstadt. The Unsun Chin Edition, es un trabajo en doble cd, que nos deja perfecta idea de esa proyección artística: El Concierto para violín; el Concierto para chelo; Le silence des Sirènes; el Concierto para piano; Chorós y Rocaná, con interpretaciones de Christian  Teztlaff (violín); Alban Gerhardt (chelo); Barbara Hanniggan (soprano); Sungwook Kim (piano), con la Berliner Philharmoniker/Simon Rattle, Myung- Whung Chung, Sakari Orampo y Daniel Harding, cumplen todo perfecto documento de una excelente trayectoria que complementa un formato audiovisual. Explosiones de color y una vitalidad salvaje que confirman los atributos de la compositora para una actitud que tiene poco de contemplativa.

Gabriel Erkoreka- Tramuntana (2017)- composición encargo de la SGAE/AEOS, en el XII Concurso de Dirección de Orquesta de Cadaqués, obra estrenada en L´Auditori de Barcelona el 18 de diciembre de 2017, bajo la dirección de Nuno Coelho, añadiendo el Concierto para violín de Chaikovki, con Daniel Lozakovich, para repetir en 2023, con la O.F. de Oviedo con Lucas Macías. Composición que se expresa a través de una serie de modulaciones métricas y técnicas extentidas, dentro de una recreación atmósfera manejada por el enfrentamiento de secciones de cuerda y viento, además de una aproximación en algunos pasajes a las tradiciones de la música catalana, tratada por la llamada del flabiol. Intensidad de dinámicas enfrentadas en esa búsqueda por cierta inestabilidad sonora que alude a una recreación ambiental permanentemente agresiva. Erkoreka estudió con Bernaola en la Escuela de Música Jesús Guridi (Vitoria) y en piano con Albert Nieto, Joaquín Achúcarro, Salomon Mikowski, Elza Kolodin y Malcolm Frager,  antes de trasladarse a la Royal Ac. of Music (Londres), en donde también sería profesor, para ampliar con Christopher Elton, estudiando composición con G.Ligeti, F.Donatoni, Luis de Pablo o H.Birtwistle.  Entre sus obras de interés: Nubes y Krater, sobre inspiración en las fuentes de la naturaleza, con notable ascendente en estructuras contrastadas y dramáticas; Akorda o Saturno, un estilo peculiar de orquestación; Kantar, que recurre al folklore vasco; Famara, inspirada en aires ancestrales de La Gomera y El Hierro; Cuatro diferencias, a partir de un tiendo de A. de Cabezón o Akorda, puesta en atriles  por la O.S. de Bilbao y un manifiesto de los recursos expresivos merced a la incorporación del acordeón como protagonista primordial.

Ramón García Balado                                                                     

27/05/2025

Endurance, de Miguel Matamoro, encargo de la RFG en estreno

 Auditorio de Galicia, Santiago de Compostela 

Auditorio de Ferrol


Obra en estreno de  Miguel Matamoro, una encomienda de la RFG, que estará en programa con Les Nuites d´eté, de Héctor Berlioz, en interpretación de la mezzo Marie-Claude- Chapulis, para completar con la Sinfonía nº 5, en Do m. Op. 67, de Ludwig van Beethoven-Auditorio de Galicia día 29, a las 30´00 h, y charla previa de Conversando con…en la Sala Mozart, 19´45 h-, concierto que repetirá mañana en el Auditorio de Ferrol. Marie-Claude Chappuis, nacida en Friburgo se formó en Salzburgo ampliando su carrera en la Ópera de Innsbruck con Briggite Fassbaender, preparando el comienzo de su carrera con maestros como R. Norrington, R. Chailly, N. Harnoncourt, Sir Colin Davis o Jordi Savall, con el que colaboró en una producción en el Liceu, con Farnace, de Vivaldi, en esta trayectoria que continuaba la serie de óperas como Idomeneo, Dido y Eneas o Guillaume Tell. El mundo del lied y la mélodie, con autores como Fauré, Satie, H. Berlioz, G. Bizet o Poulenc, aspecto que cuida con la dinamización de su propio festival, en el que suele acompañarse por el pianista Malcolm Martineau, es una constante en su vida, ya desde muy joven, cuando acompañaba a su madre, también cantante. De su cd´s, dos muestras: Sous l´empire d´amour y el trabajo inspirado en tradiciones suizas, Au cuur des Alpes, también en estas atenciones, los géneros barrocos con obras como la Pasión según San Mateo, de J.S. Bach  

 Miguel Matamoro, es músico con formación en Musikene, con los compositores Ramón Lazkano y G. Erkoreka, para seguir en la Ac. Katarina Gurska, con Elena Mendoza, Johannes  Mª Staub, Pirtluigi Billone, Félix Ibarrondo, Lukas Fedele o Narcis Bonet. Obras suyas fueron estrenadas por la O.S. de Euzkadi, la OSG, la O. F. Leos Janacek, la OCAZ Enigma, Vertixe Sonora, el TAC, la RFG y Espai Sonoro. Recibió el encargo del Consello da Cultura Galega, por su obra Duns folios que foron brancos, estrenada en el Teatro Afundación (Pontevedra), con la RFG, dirigida por Maximino Zumalave y con el Collegium Compostelanum (2018), incluyendo en programa la Alborada de Veiga, en arreglo de J. Durán, alguna de las Canciones Xacobeas, de Antón García Abril, Dolora sinfónica, de Gregorio Baudot y una obra de Mª Victoria Moreno.

 Obras de reciente creación, había sido el compromiso para la Fundación Juan March, en su ciclo Compositores sub-35 (X), que pondrían en atriles OCAZEnigma, dirigido por Asier Puga, un sexteto que incluía obras de compositores como Helena Cánovas, Carlos Brito, Alberto García Aznar, Carolina Cerezo, Nasim Kharassani y Fabiá Sontcovsky. De su firma, la pieza Sottogrido, cuyo material nacía de un núcleo que podría pasar inadvertido, el crujido de una veleta en el puerto de Aguete (Rías Baixas), veleta que condensa parte de las vivencias cuyas y que estaba elaborada en torno a las posibilidades ocultas en un crujido, que demostraba la experiencia de los espacios logrados a través de los armónicos del violín que intentaban captar el timbre de la flauta como un juego de susurros. Se trataba de explorar de diversas maneras, sin perder el anclaje identitario, el armazón entorno a ese pequeño motivo, marcado como sottovoce (voz baja) hasta llegar a un corte abrupto en forma da capo, en un misterio de quietud que se desvanecía con el clarinete bajo y el chelo, a modo de pulso interno.

En las propuestas del Festival Resis, de A Coruña, un estreno con la Banda Municipal, en junio de 2022, que se unía a obras de Iannis Xenakis, Voro García y Chen Yi, bajo la dirección de su titular Marcel Ortega i Marti, su obra había sido Passacaglia, obra encargo entonces de la Banda Municipal   de Castelló, quien resuelta aquí por Ortega i Martí, por su exigencias incisivas y agudas, otorgándole el necesario talante que exigía, siendo entonces su primera obra compuesta para banda. La Passacaglia, reinventaba dentro de sus parámetros las exigencias formales de ese ancestral estilo con precedentes claros en el barroco y a la que concedía pinceladas cómicas para conseguir el punto ansiado y que no dejaría de llevarnos a un imaginario circense. Una síntesis de patrones canónicos de elementos que resumían esa pieza en la que destacaba un importante episodio central en forma de marcha y las variaciones abiertas por los timbres y cromatismos, cuidando las exigencias que requerían las dimensiones de una escritura para banda.

Héctor Berlioz con su ciclo Nuits d´eté Op. 7, conjunto de mèlodies que no desdeñan un talante popular con detalles que nos acercan a Schubert y que sigue con precisión la importancia de los textos, motivado por la movilidad armónica que nos seduce por su lirismo, sin dejar al margen el posible tratamiento orquestal, un ciclo pensado para voz de mezzo o tenor, destacando por su cualidades Le spectre de la rose.  Villanelle, primera de las seis, parte de un texto de Gautier ciertamente ligero y de aromas amables sin grandes exigencias, una oportunidad que posiblemente pueda acercarle a Schubert.  L´espectre de la rose, será con el tiempo una pieza que atraerá la atención de Nijinski, una extensa mélodie, que luce por su legato un poco a la italiana que se sirve del texto realzando su dramatismo como soporte. Sur les lacunes, un lamento que se ofrece en el espacio de ondas que divagan entre tonalidades mayores y menores con clara incertidumbre que manifiestan un aire de queja, dejándonos una impresión de abandono. Absence, el más célebre resuelto en dos estrofas que se expresan dentro de un intenso dramatismo y que para agudos analistas podrá evocarnos al Gluck de J´ai perdu mon Euridice, en su ópera Orfeo.  Au cimetière. Claire de lune usa como argumento armónico una delicada musicalidad que tiempo después tendrá su confirmación en obras de Duparc en L´invitation au voyage. Las cuerdas copan una atención clara en el final con Clair de lune.   L´ille inconnue, cumple con su exigencia de mèlodie de despedida, entre la felicidad y la alegría dentro de un espíritu nostálgico. La orquestación pletórica podrá asimilarse a la que desarrollará en óperas como Les Troyanes, en el pasaje Nuit d´ivresse o en Béatrice et Bénédict.

Ludwig van Beethoven- Sinfonía nº 5, en Do m. Op. 67-, para Grove, su fortuna se debe a su prodigiosa originalidad, su fuerza y su concisión en el Allegro con brio, el misticismo del Scherzo o la sorprendente grandeza, impetuosidad, espíritu y pathos del Finale. Ballola confirmará que tal vez ninguna otra obra de madurez supo el autor traducir con tan ejemplar evidencia los valores musicales absolutos de su contenido individual de su lirismo heroico, o la apreciación del mítico Furtwängler, quien sentenciará que esta sinfonía en su comienzo insólito aparece como único en toda la historia de la música. El Allegro con brio, con esas cuatro notas, se convertirá en una célula lapidaria técnicamente audaz y plena de misterio, que anuncia la trágica confrontación entre el hombre y el fatum. El Andante con moto, prepara su primer tema apacible, semejante a la voz de los espíritus puros que nos entregan a un estado de consuelo, en una sencillez que rememorará a su maestro F. J. Haydn. Los dos tiempos finales quedan curiosamente fundidos  dentro de lo que resulta un fresco único y grandioso, comenzando por el estilo de Scherzo que prepara el Finale que reafirma su evidencia de  obra maestra de dimensiones órficas por su densidad de trascendencia a lo sublime y su obsesión emotiva logrando la sinfonía alcanzar una conclusión simbólica destinada a convertirse en un manifiesto de su credo estético.

Ramón García Balado

23/05/2025

Alberto Rosado: Solos no CGAC, con obras de Béla Bartók, G. Ligeti y Gyögy Kurtág

 Centro Galego da Arte Contemporánea, Santiago de Compostela


Solos no CGAC
es un ciclo que se presenta en ese centro y que anuncia cuatro conciertos comenzando con el del pianista Alberto Rosado- lunes 26, a las 20´00h-, al que continuará en período otoñal en octubre la mezzosoprano Helena Ressurreição- día 1 de octubre- y la acordeonista María Zubimendi- día 29- y ya en noviembre las percusiones de Noé Rodrigo- día 26, de noviembre, actividades dirigidas por la musicóloga Rosa Fernández, bajo la coordinación de Carmen Hermo.  Alberto Rosado colabora frecuentemente con primeras orquestas y en iniciativas como el Proyecto Guerrero, Modus Novum o Plural Ensemble, con el que realizó registros dedicados a Fabián Panisello- col legno-, que tendrá refrendo en trabajos sobre obras de César Camarero, J.M. López López, ampliando evidencias en sus participaciones junto a maestros como P.Boulez, Lachenmann, L. de Pablo, C.Halffer, T. Hosokawa, P. Eötvös, mientras disfrutó del beneficio de ser dirigido por artistas como Josep Pons, Pedro Halffter, J. R. Encinar, Jonathan Nott, Susanna Mäklki, Arturo Tamayo, Fabián Panisello, Zsolt Nagy, J.L. Temes o Massimo Quarta. Destacan precisamente, grabaciones  como el Concierto para piano y orquesta y los Movimientos para dos pianos y orquesta de J.M. López López, en confluencia con las indagaciones electroacústicas, con la Deutches Symphonie O., con Johannes Kalitzke (Kairós) o la integral para el teclado de C.Halffter, entre registros dedicados a O.Messiaen, Ligeti, Takemitsu o J. Cage, o el trabajo de recuperación sobre la memoria de Antonio José, vilmente asesinado en los años de infamia. También el trabajo Dipolo, con el chelista David Apéllaniz, en la serie de registros incluidos de músicos españoles y latinoamericanos, de la Fundación BBVA o el Homenaje a Martha Graham, de Ramón Humet, sobre la poética de Mario Lucarda. El trabajo Fin du Temps, comprende cuartetos de Messiaen y Takemitsu, con J. L. Estellés, Aitzol Iturriagagoitia y David Apellániz, editado por IBS-Classical.

Rosa Fernández, musicóloga y directora del ciclo, tuvo protagonismo destacado en las Xornadas de Música Contemporánea 2022, Poñer o foco, para los conciertos propuestos por la JONDE FOCUS- Cartografías do plurar-, en los que medió como comentarista y presentadora de las obras tratadas por  músicos de la JONDE y el Plural Ensemble, que pondrían su rúbrica sobre compositores como Kaija Saariaho, Vykintas Baltakas, P. Cashian, Missy Mazzoli, Steve Reich, P. Jodlowski, P. Eötvös o J. Torres, Alicia Díaz de la Fuente, Elena Mendoza, Raquel García- Tomás o Hara Alonso. En marzo de 2024, también ejerció como presentadora en el concierto (En) Foco, con motivo del estreno de la obra encargo De mar a mar, de Jacobo Gaspar, obra en la que prevalecía el ruido blanco para emular el sonido marino, sobre el protagonismo de trinos y glissandi, que remarcaban la idea de la fluidez del agua. Rosa Fernández viene avalada por su expediente confirmado en la Real Ac. de Bellas Artes de San Fernando de Madrid; el cum-laude de la Universitat Autónoma de Barcelona; las labores de investigación en la Università degli Studio dei Milano; Institute de Recherche (IReMus)- Sorbonne de París- además de colaborar en trabajos de investigación al tiempo que es parte activa de la Europea Society of Aesthetic (Turin), recibiendo el Premio de Música Iberoamericana  Tomás L. de Victoria y el de composición Andrés Gaos. Abundantes los programas que imparte entre cursos y conferencias que van desde el Collège d´Espagne parisino, al Instituto Cervantes de Bruselas, el propio CGAC o certámenes como el Cristóbal Halffter.

Para Alberto Rosado, este concierto en tres bloques de obras de Bártok, György Ligeti y Gÿorgy Kurtág.  la selección de piezas elegidas de Béla Bartók, creador que en la perspectiva de Luca Chiantore, es dominador de un ejemplo que apunta a un timbre seco, preciso, sin demasiadas concesiones a la variedad de ataque, reflejo de una pureza no solo musical, sino también espiritual, que buscaba en sus repetidas estancias en la campiña húngara. Asunto que influiría de manera decisiva en toda su técnica: la austeridad extrema en su ataque, plenamente reflejada en sus grabaciones discográficas, generando un sonido simple y depurado, el sonido de quien ha renunciado por completo a los encantos de la sociedad. Para el compositor- Musique de la vie (1981), Todos los esfuerzos tienen que tender actualmente a una búsqueda de lo que podríamos llamar una genial simplicidad…La razón por la cual hemos asistido durante los últimos 25 años, a este gran caos creativo es que bien pocos compositores han sabido dirigir sus esfuerzos hacia este objetivo, y también porque la creación musical ha contado demasiado sobre el valor de los medios expresivos más inesperados, que a menudo son los  menos adecuados para transmitir el pensamiento creador. Esto es lo que los snob, llaman el genio creador.  Bartók veía el piano como un medio privilegiado para alcanzar la expresión simple y sin concesiones; es lógico, por lo tanto, que este objetivo primordial, lejos de cualquier banalización antirromántica, realzara el componente percutivo de la interpretación: Desde hace mucho tiempo se ha apreciado el carácter neutro del piano. Me parece no obstante que, que sólo la tendencia actual de admitirlo entre los instrumentos de percusión, ha permitido valorar adecuadamente esta peculiaridad, un texto del autor publicado en el Musikblätter des Anbruch, en 1927. En programa, el Allegro vivace, de la Tanz- Suite Sz.77; la música nocturna de Szabadban BB. 89; el Andante de las Bagatelas Op. 6; el rubato, de las mismas bagatelas; la Sonata para piano BB. 88 (1926); el Sostenuto e pesante, de la Sonata para piano BB.88, al que se añade el Allegro molto, de esa sonata; el Vals: Presto (Ma mie danse), de la sexta Bagatela Op. 6, para completar con el intenso Allegro molto, de sus Danzas búlgaras de su sexto libro, de Mikrocosmos Sz. 107.

Chiantore será preciso en aproximarnos a Gÿorgy Ligeti, autor que no se conformaría con el estilo de obras que le hicieron célebre: el inmovilismo de su Requiem; el motete de Lux Aeterna, con su inconfundible polifonía  o las atmósferas siderales de 2001, Odisea del espacio. En 1976, su obra para dos pianos anunciaba una nueva orientación estética con el tríptico compuesto por Monument; Selbstportrait y Bewegung y otra para piano, con trompa y violín (1982), que sanciona definitivamente su transformación lingüística. A partir de entonces, Ligeti mostró un profundo interés por este instrumento. Su estilo estaba alejándose profundamente de músico anterior: las masas sonoras estaban desapareciendo dando paso a una escritura sobria y a menudo lineal, que no descartaba las consonancias ni los ritmos de ascendencia popular. La elaboración del material se simplifica y las formas se vuelven a menudo muy transparentes, especialmente en el Concierto para piano y orquesta, mientras que el desafío técnico vuelve a terrenos que parecían olvidados. Impresión que ofrecen sus numerosos Estudios para piano, publicados en 1985. El intento de recuperar la dimensión virtuosística de la interpretación, es evidente desde el primer momento desde su asombroso Désordre, que abre el primer cuaderno con una sonoridad que evoca a Bartók. De su catálogo, tendremos una selección de los Estudios para piano (Fanfares nº 4), (Der Zauberling nº 10), Automne à Varsovie nº 6, (En suspens nº 11), Desordre nº 1), (Fém, nº 8), (Cordes à vides, nº 2) y (L´Escalier du diable nº 13), con el cuarto tiempo Tempo di valse, poco vivace (a l´orgue de Barbarie), perteneciente a la Musica ricercata.

György Kurtág, una vez que traspasa la frontera de su Hungría natal, a finales de los cincuenta, tomará contacto con la vanguardia occidental, en un planteamiento de tabula rasa, momento de su llegada a los círculos parisinos junto a Marianne Stein, Messian y Milhaud, Stochausen o Luciano Berio y el citado Ligeti, que le acercan a las innovaciones seriales libres, ensambladas con las grandes formas. Obras de un pudor extremo, marcadas por un asomo de violencia expresiva implacable, un compositor en esencia irreductible a los condicionantes en puja. Para orientarnos en sus tendencias, la recurrencia a las poéticas de Sándor Weöres, Péter  Bornemisza, Anna Akhmatova, Rimma Dalos, Samuel Beckett, F. Kafka o Hölderling. En reconocimiento, Luis Gago, recalcaba la importancia de la publicación de sus miniaturas publicada por ECM, admitiendo que poder degustar sorbo a sorbo, obras compuestas a lo largo de cuatro décadas, se percibía como un raro privilegio. Al margen de escuelas o vanguardias, el autor ha construido una obra llamada a engrandecerse con el paso del tiempo,  cultivando como pocos lo pequeño, lo breve, lo engañosamente fugaz y fragmentario. Una obra representativa por excelencia, Játékok (Juegos), de la que tendremos Fanfarria para los esponsales de Judit Maros; la quinta fanfarria; el Lamento; la Antífona en Fa sost. M; Jugando con el infinito; el Homenaje a Ferenz Farkas (evocación a Petrushka); la Pelea de los cinco dedos; Preludio y coral; Homenaje a Christian Wolff; Vals- homenaje a Shostakovich; Vals- homenaje a Gÿorgy Ránki; La moza de los cabellos de lino y Tira y afloja, además del Vivo de las Ocho piezas para piano Op. 3.

Ramón García Balado   

21/05/2025

Requiem en Do m. (à la mémoire de Louis XVI), de Luigi Cherubini, por la Orquesta y Coro de la OSG

 Palacio de la Ópera, A Coruña


Dos obras para el concierto en el Palacio de la Ópera de A Coruña-días 23 y 24, a las 20´00 h., incluyendo en programa la Sinfonía Hob.I.44 (Trauer) en Mi m., y el Requiem en Do m. (à la mémoire de Louis XVI), de Luigi Cherubini, contando con el Coro y Orquesta de la OSG, bajo la dirección de Javier Fajardo y la responsabilidad en la dirección conjunta de Carlos Mena.  La obra de F. J. Haydn recibiría el subtítulo a comienzos de la década de 1700, tal cual podrá reconocerse por el catálogo de Breitkopf, obra identificable estilísticamente con el ideario Sturm und Drang o Estehazy II, reflejo meridiano de una transformación de la evolución y el talante del autor, conservando con meditada concisión un cuidado orgánico en el que destacaban en justo equilibrio el número de instrumentos orquestales, un poco a la par con las sinfonías precedentes, aunque probando con una expresión más cercana al espíritu galante y con una pretensión más personal, aceptando que sus propuestas en este género, se había desarrollado con actitudes ciertamente distintas, pesaba entonces el asiduo compromiso de trabajos de compromiso, logrando aquí una reconocible tensión armónica, audaces intervalos, ritmos sincopados y un contrapunto más pronunciado, observando que bastantes de obras, destacan por el uso de tonalidades menores. El primer tiempo, Allegro con brio, se avanza con un forte unísono, que recuerda a otras de sus sinfonías, aspecto en el que también coincide con Mozart y que esta vez encuentra respuesta en una idea cantabile, para seguir con un tema que recurre a motivos anteriores, en el relativo Sol M., configurando con calculada impresión un clima de desarrollo que evoca paradigmas de su quehacer y que concede cauce para la entrada el segundo movimiento, el Minueto allegretto, sombra que responde al calificativo de Canone in Diapason, acuñado por el propio maestro por esa especie de respuesta trazada en forma de canon que pone barreras frente al tiempo anterior, dentro de una necesaria respuesta, con un trío en Mi M., remarcado por las cuerdas y la trompa en registro agudo. El Adagio, valdrá para que las cuerdas en sordina, destaquen sonoridades que nos recuerden a un pasaje del oratorio La Creación, con un acompañamiento de tresillos fluidos que recrean una situación de cierta inmovilidad anímica para trasladarnos al Finale  presto que se aferra a la determinante tonalidad en menor, rigurosamente monotemática, valiéndose de un unísono que nos lleva con determinación al Primer tiempo.

Luigi Maria Carlo Zenobio Cherubini (1760/1842)-Requiem en Do m. (à la mémoire de Louis XVI) -, se expresará en estilos de confluencia entre el barroco italiano y tendencias de C.W. Gluck, merced a las influencias aceptadas del compositor de la reforma meridiana en el mundo de la ópera, prestando atención al trazado de sus construcciones y la elegancia  de su vocalidad, en obras como Armida Abbandonata, Olimpiade o Médée, claridad en sus texturas y variedad en los recursos utilizados que en las obras sacras, alcanzarán una dimensión distinta. Compositor asentado en París, fue maestro relacionado con el mundo cortesano, recibiendo por ello el protagonismo relevante de asumir la dirección de la École de Musique de la Garde National (1792), espacio que se convertirá en el Conservatorio parisino, para continuar a partir de 1822, en titular vitalicio, cargo que ostentará con una particular actitud, que le traerá más de un conflicto y burlas entre sus colegas como sería el caso de Héctor Berlioz, autoridad por excelencia a ese período histórico. Fue la ópera un argumento para proyectarse socialmente, pero en el mismo no desechamos la música sacra, que va desde la serie de Misas: Messe de Chimay, a la Deuxieme Messe solennelle, la Troisième Messe solennelle…exécutée au sacré de S.M. le roi Charles X, abarcando en total a un centenar de obra que por encargo, se repartirán entre Bolonia, Milán o Florencia, obras que muestran la herencia vienesa de F.J. Haydn y Beethoven, que se entremezclan con las obras dedicadas para la escena, un creador un tanto al margen, por lo que muchas de sus obras no superaron lacriba del tiempo.

El Requiem en Do m (à la memoire de Louis XVI, para coro y orquesta, es obra encargo de 1816, consecuencia de su nombramiento como superintendente de Capilla, un trabajo en recuerdo de Luís XVI y que se estrenó el 21 de enero de 1817, en Saint-Denis, conmemorado  la fecha fatídica de la ejecución del monarca, alcanzado en esta obra el grado sumo de las obras destinadas a este género, y que volverá a escucharse en Viena dos años después y en Leipzig, en 1820. Se acepta que tanto Beethoven, como R. Schumann, Brahms o Verdi, apreciaron la calidad del Requiem, obra que dentro de este apartado, se mantendrá en catálogo. Los dos Requiem compuestos, mantienen similares estructuras, que se resuelven en siete tiempos. Introitus et Kyrie (Largo sostenuto, en Do m., muestra una ostentosa escritura polifónica muy recogida, arropada por un solo de violonchelo y fagotes, antes de que el coro y el resto de la orquesta se manifiesten en un pasaje en pianísimo, hasta llegar al Te decet hymnus y el final Exaudi orationem.  El Graduel (Andantino largo), tiempo más breve podrá recordar a Mozart desde las primeras palabras Requiem aeternam donna eis Domine et lux perpetua luceat, en un estilo de antífona y con una orquesta limitada a las cuerdas.  Diaes Irae ( Allegro maestoso), tiempo desarrollado en un continuo sin reposo, mostrando una entrada de metales Tuba mirum, hasta encumbrarse en el Rex tremendae, con respuesta en la llamada del Confutatis y en el Vocame cum benedictis, que se completa en el Lacrymosa, con un tema de tres notas dobles con el coro en pianissimo.   El Offertorium, denso tiempo en la tonalidad principal de Mi b M., parte de un Andante sobre brillantes sonoridades Domine Jesu Christie, rex gloriae, arropado por cuerdas en ritmos incisivos que se acentúan en el De poenis inferni y en Quam olim Abrahae, hacia el Hostias concentrado e íntimo.   Santus (Andante, en La b M.), luminoso y breve para resaltar el texto Benedictus  qui venit in nomine Domini, con respuesta  de la orquesta en plenitud.  Pie Jesu (larghetto, en Fa m.), resuelto en valores largos al tiempo lírico y meditativo, marcado por las oposiciones de las familias instrumentales. Cierra el Agnus Dei (sostenuto, en Do m.) que se impone por su enervación interna y su pasión dentro de una apreciable serenidad, que deja una sensación de emoción plena por el clima recreado, con la cadencia conclusiva en Do M., en un motivo pianissimo.

Ramón García Balado

La soprano Miren Urbieta-Vega, con la Orquesta Gaos, de Fernando Briones, clausura el VIII Festival Clasclâs, de Vilagarcía de Arousa

  Auditorio de Vilagarcía de Arousa Clausura del VIII Festival Clasclâs , de Vilagarcía de Arousa , en el A uditorio de la ciudad- día 28, ...