Sala Mozart. Auditorio de Galicia, Santiago de Compostela
Tercer concierto de la serie Contemporáneas con el flautista André Cebrián y el guitarrista Pedro Mateo González, en la Sala Mozart del Auditorio de Galicia- día 9, a las 20´30 h-, con obras de Leo Brouwer, Alicia Díaz de la Fuente, Toru Takemitsu, Norma Beecroft, Feliu Gasull y Robert Beaser. El flautista André Cebrián, solista de la Scottish C.O. fue alumno de Luís Soto y Laurent Blaiteau, antes de seguir en Francia con Pablo Sagredo, János, Bálint y Jacques Zoon, y probar como miembro en formaciones como la JONDE, la Britten-Pears o la Gustav Mahler Jugendorchester , siendo igualmente invitado por la RFG, la BBC S.O., la Philharmonia Zurich, o la O. S. de Castilla y León. Colaboró con directores como J.C. Spinosi, M. Emelyanychev, G. García-Calvo, J. Swensen, P. Meyer o P. Whelan y grupos como Azahar Ensemble, Natalia Ensemble, tras fundar el Festival de Música de Cámara Anguiano (La Rioja), ejerciendo la docencia en el CSMA y en la Academy Barenboim- Said y en el Royal Conservatoire of Scotland. El guitarrista Pedro Mateo González, fue solista con orquestas de primer ámbito nacional, siendo dirigido por maestros como A. Posadas, A. Leaper o Leo Brouwer en coliseos internacionales. Grabó para Naxos obras de Brouwer y con Eudora, La Sonatas para violín y guitarra de Rebay, además de las suites a solo de J.S. Bach. Participó en certámenes como los de Miami Guitar Fest, y el profesor del Centro Katarina Gurska y el Conservatori Superior dels Illes Balears, impartiendo a la par clases magistrales.
Leo Brouwer-maestro de maestros-, tendrá la Sonata nº 1, (Mitología del agua (2009): Nacimiento del Amazonas/ El lago escondido/El salto del Ángel/El Güije (Duende) de los ríos de Cuba. Un encargo del guitarrista Sef Albertz, resultando un paseo imaginario por el Amazonas, y que nos lleva a Los pasos perdidos, de Alejo Carpentier, dejando en sus tiempos imágenes inspiradas en el lago de los Mayas, tomadas de los grandes saltos de agua como Tequendama, Iguazú o El Ángel, a través de imágenes intertextuales que evocan naturaleza y cultura. El nacimiento del Amazonas, recrea un ambiente acuático de ritmos irregulares y contrastantes en lo tímbrico. El lago escondido, altera aguas calmas y vivas sobre efectos de frullato, armónicos y secciones semialeatorias. El salto del Ángel, otorga protagonismo al silencio y a la indagación tímbrica, dejando a El Güije de los ríos de Cuba, un ritmo de orden primordial que toma una cita de Schumann, enlazada con la tradición popular cubana y europea, en el uso de técnicas extendidas tratadas por ambos solistas.
Alicia Díaz de la Fuente- La tierra, los dioses, el Creador y los brujos (1991), digna representante de nuestras vanguardias con estudios junto a Luís de Pablo, Salvatore Sciarrino, Brian Ferneyhoug, Murail, Grisey o H. Lachenmann y José Luis Delás, en la Universidad de Alcalá de Henares, o en el IRCAM parisino, sabrá destacar en su música por el cuidado en sus atenciones a las tímbricas y a las resonancias o la las formas orgánicas, con ejemplos como La tierra, los dioses, el Creador y los brujos, siendo una breve e intensa miniatura para flauta y guitarra, que articula imágenes sugeridas por el propio título. Un discurso basado en densidades y colores, con sonidos al aire, armónicos, resonancias abiertas y tenues ataques. La flauta aporta brillo mientas la guitarra sostiene la estructura grave y resonante, evolucionando la forma en un luminoso clima de misterio, como un rito sonoro.
Toru Takemitsu (1930/96)- Towards de Sea (1981): The Night/ Moby Dick/Cape Code- , obra compromiso para Greenpeace, en su reclamo Salvemos las ballenas y estrenada por Leo Brouwer, observando influencias de Debussy, Olivier Messiaen y John Cage, del que heredará el timbre y la inspiración del sentimiento zen, en relación con la tradición japonesa, en la que destaca el uso del biwa en la estética orientalizante. Un homenaje al océano como fuerza creadora. Referencias en sus tiempos, a Moby Dick (Melville); con un pasaje que se asocia al agua como meditación, basándose en el motivo Mi b-Mi- La (Sea en notación alemana o Mar, en inglés, que recorre toda la pieza. La escritura para flauta evoca la shakulachi japonesa, con armonizaciones y técnicas especiales, mientras la guitarra nos recrea con una sonoridad amplia y resonante.
Norma Beecroft (1934/2024)- Tre Pezzi Brevi (1962): Moderato, con energía/ Lento ed espressivo/Allegro ma non troppo. Compositora canadiense que ejerció en el Canadian Music Associates (Toronto), consolidando un impacto en la divulgación de la música contemporánea, tras formarse con John Weinzweig, A. Copland, Foss, G. Petrassi y en flauta con Gazzelloni. En Darmstadt y Dartington, se relacionó con B. Maderna, K.H. Stockhausen, J. Cage, L. Nono y L. Berio, trabajando en el Estudio de Fonología de Utrecht y en el Columbia- Princeton Studio (New York), con Davidosky. Tre Pezzi Brevi, para flauta y arpa, escritas para Gazzelloni, combinan técnicas seriales con exploraciones tímbricas con influencias de Maderna y detalles de Stockhausen, para ser estrenada en Palermo y Darmstadt, en tratamiento para flauta en diálogo con la guitarra o quizás el piano, anticipando forma en visión electroacústica.
Feliu Gasull (1959)- El Peixet de Bloomingtong (1986)-, músico con estudios en el Conservatorio de Ginebra y en la Indiana University (Bloomington), que la ha permitido ampliar la docencia en la ESMUC, disponiendo ya de un importante catálogo de obras, en especial para guitarra y trabajos sinfónicos, corales e instrumentales, con un personal lenguaje expresivo en el que se concitan tradiciones clásicas, junto al flamenco y las influencias mediterráneas, entre las que asoman Manuel de Falla e incluso Heitor Villa-Lobos. El peixet de Bloomington, fue escrita en principio para flauta y guitarra en una dedicatoria al maestro Joan Sant Martí, en íntimo homenaje a su etapa formativa en la EUA. Una pieza que ofrece un estrecho diálogo entre los dos instrumentos en un acercamiento al juego de melodías transparentes y evocadoras con un soporte de armonías sutiles y líricas que entrelazan la naturalidad de las raíces populares.
Robert Beaser (1954)- Mountain Songs (1985): Barbara Allen/ House Carpenter , una síntesis entre las tradiciones europeas y norteamericanas , con encargos recientes como los recibidos por la New York Philharmonic O., o la Sinfónica de Chicago, que le permitió grabar para Argo, New Worldo EMI-Electrola. Mountain Songs resulta un ciclo de ocho movimientos sobre melodías folklóricas de Los Apalaches, estrenado en el MoMA, por Paula Robinson y Elliot Fisk, piezas basadas en melodías tradicionales, que el autor transforma en trabajos personales sin repeticiones ostensibles, creando una arquitectura musical que recuerda modos del clasicismo y el romanticismo e incluso el impresionismo. Dos serán las piezas elegidas de este ciclo: Barbara Allen, una forma de balada que nos describe a una joven que rechaza a su pretendiente lo que le provocará la muerte y The House Carpenter, también otra historia de una joven que abandona a su pareja para entregarse a un amante, encontrando la muerte en el mar. Beaser mantiene la esencia dramática de estas baladas, presentadas con un lenguaje rico y complejo, pleno de fuerza rítmica.
Ramón García Balado




