25/11/2025

El ideario masónico en la música de Mozart

 Auditorio de Galicia, Santiago de Compostela


Obras para canto de W.A. Mozart en el Ciclo de Lied, propuesto por Amigos de la Ópera de Santiago en el Auditorio de Galicia- día 27, a las 20´30 h-, en el que serán protagonistas el tenor Ilker Arcayürek, con el pianista Maciej Pikulski, acompañados por el Coro Masculino de Amigos de la Ópera de Santiago, dirigido por Joan Company. El salzburgués ingresaría en la masonería el 14 de diciembre de 1784 en la logía Zur Wohltätigkeit, en la que ejercía como gran maestre el barón Otto von Gemmimgen, período en el que esas fundaciones serían lugares de reunión de minorías de ilustrados. Una publicación de Gérard Gefen, dejará constancia en un trabajo de consulta apreciable, Les musiciens et la frac-maçonnerie (1993), una atalaya para asomarse a la trascendencia de su legado. Opiniones habrá sobre la menor importancia de la francmasonería ejercerá en el músico, que llegaría a implicarse menos en los círculos de los que sería afecto desde el punto de vista ideológico, aunque el probable que a la hora de formular de plantear ciertas inquietudes de orden espiritual  fuese permeable a esas demandas, quedando evidencia en la importancia correspondencia mantenida con su padre Leopold. De su música, las piezas para ceremonias masónicas, resultará desigual y para seguir la estela, bastará con comparar las cantatas Dir, Seele des Weltalls K. 429 o Die Maurerfreude K. 471.

En programa, O heiliges Band der Freundschaft (Oh sagrado lazo de amistad)), para voz y piano, obra del último período de su estancia en Salzburgo y que se presenta como un minué lento aceptando que su texto puede asociarse a un sentimiento masónico aunque de una forma que nos aporta una belleza enternecedora y libre, difícil de describir. Otro lied, Gesellenreise K. 468 (El viaje de los compañeros), muestra de emotiva espiritualidad aparentemente destinada a la logia masónica Zu wahren Eintracht, con motivo de la incorporación de nuevos adeptos en una ceremonia conmemorativa, cuyo texto original había sido escrito por  J.F. Ratschyky. La presencia de un preludio de piano antes del canto y de un ritornello final marca una diferencia bastante nítida respecto a los procedimientos de los compositores de lieder de las escuelas del norte alemanas, su padre Leopold, había entrado a formar parte de la masonería, en aquel mes de marzo de 1785.

Eine Kleines Deutsche Kantata K. 619 (Pequeña cantata masónica), única en su repertorio en forma de lied, compuesta en Viena, goza del beneficio de ubicarse entre dos obras sublimes: el Ave verum K. 618 y la  Zauberflöte K. 620, cantata menos recordada supone uno de los más elevados testimonios de su espiritualidad, obra compuesta en seis partes  de gran simetría desde el Andante inicial al Allegro final. El texto lo aportaría un personaje de menor relevancia, F. Ziegenhagen e igualmente resulta alusiva al mundo masónico quedando en su fundamento una cercanía al pensamiento de Jean- Jacques Rousseau, al  que le autor del texto tenía en gran valoración como guía espiritual. En cuanto a su manuscrito, Konstanza lo donó tras su muerte al diplomático sueco Silvertolpe, lo que confirme que en la actualidad se encuentre en la Universidad de Upsala, su querida compañera de travesía cotidiana, había dado a luz en aquellas fechas, al nacimiento de su hijo Franz Xaber Wolfgang, y que solo heredaría una pequeña llamita musical de su padre, por lo que su importancia histórica resultará casi irrelevante, quedando como un personaje casi menospreciado por la historia de la música.

An die Freude K. 53 (A la alegría), lied primerizo en un adolescente de 12 años, que abordará una canción- danza pensada desde un punto de la instrumentación y del período de su operita Bastian und Bastianne, lied de inspiración masónica por influencia de su padre en un momento en el que se volverían a encontrarse con el médico J. Wolff, en Paris (1778), con el que Leopold había tenido experiencias musicales de sencillo entretenimiento sin mayores ambiciones. Wolfgang a buen entender despuntaba en trabajos  de aprendizaje desde minués, zarabandas, gigas y otras curiosidades.  Zerfliesset heut, gelibte Brüder K. 483 (Fundíos, hoy, queridos hermanos),  se empareja con el Lied Logenlied K. 484, ambos masónicos y que vieron la luz en 1785, en conmemoración de la logia Zurneugekrönnten Hoff nung (A la nueva esperaza), fusión resultan de tres logias vienesas preexistentes, ofreciendo la primera un homenaje de mérito al buen José II, responsable de las nuevas disposiciones. La K. 484, es un devoto canto de acción de gracias a los nuevos maestros exhortados a guiar a sus sucesores.

Nueva Cantata masónica por Eine Kleine freimaurer- Kantate K. 623, último testimonio de la fe masónica y elaborada mientras escribía el inconcluso Requiem K. 626, a la vista de las preocupaciones de Konstanze por su estado de salud, pieza  cuyo texto se atribuirá a K.L. Schikaneder, para la que otros especialistas la conocerán como Las Loh der Freundeschaft ( Loa a la amistad) y que consta de cuatro partes: un coro de apertura, una aria para tenor, un dúo para tenor y bajo y un coro final, Destaca el uso de tres voces masculinas que aportan unos matices tímbricos de notable sugestión. La masonería no tenía reglas por lo que  Mozart debió crear un simbolismo musical de tratamiento personal, el ritmo de los tres golpes dados a la puerta, que alcanzó después un alto valor significativo en Die Zauberflöte, y las notas ligadas de dos en dos, que simbolizan los lazos  de amistad, caracterizan esta cantata. Laut verkünde unsre  (Freude 626 Con las manos juntas), parece  que debía seguir al coro final de la  Freimaurenkantata y de la que se ha llegado a sospechar de un autenticidad mozartiana de este canto masónico, para el catálogo de Koechel ciertos detalles de la técnica compositiva y de la parte del bajo  permiten dudar de que ese canto fuera del salzburgués, aunque faltan pruebas creíbles, el texto se atribuye a Schikaneder , igualmente sin controversias.

Dir, Seele des Welalls, o Sonne  K. 429 (A ti, Oh Sol, alma del universo), documento masónico rodeado de muchas controversias, común a otras dos como la K. 419 y K. 471; además de otros lieder masónicos, resulta de un tono solemne que preanuncia obras ya citadas. Musicalmente es un soberbio que aparenta cierta carencia de unidad, aspecto que encontramos en obras de intención masónica y  que en esta aria, tendría como destinatario a  Adamberger, presentando un talante intimista. Die Maurerfreude K. 471 (La alegría masónica), compuesta e Venecia, en un momento fecundo, una cantata de aporta un estilo renovador y especialmente característico, cantata estrenada  con motivo de su colaboración con la logia Zur gekrönte Hoffnung a la que pertenecían padre e hijo.

Ramón García Balado

Ningún comentario:

Publicar un comentario

Concierto de Navidad de la OSG, entre John Williams y Georges Bizet

Palacio de la Ópera, A Coruña Concierto de Navidad de la OSG, con piezas para estas fechas, tomadas de pasajes sonoros de bandas sonoras d...