21/05/2025

Requiem en Do m. (à la mémoire de Louis XVI), de Luigi Cherubini, por la Orquesta y Coro de la OSG

 Palacio de la Ópera, A Coruña


Dos obras para el concierto en el Palacio de la Ópera de A Coruña-días 23 y 24, a las 20´00 h., incluyendo en programa la Sinfonía Hob.I.44 (Trauer) en Mi m., y el Requiem en Do m. (à la mémoire de Louis XVI), de Luigi Cherubini, contando con el Coro y Orquesta de la OSG, bajo la dirección de Javier Fajardo y la responsabilidad en la dirección conjunta de Carlos Mena.  La obra de F. J. Haydn recibiría el subtítulo a comienzos de la década de 1700, tal cual podrá reconocerse por el catálogo de Breitkopf, obra identificable estilísticamente con el ideario Sturm und Drang o Estehazy II, reflejo meridiano de una transformación de la evolución y el talante del autor, conservando con meditada concisión un cuidado orgánico en el que destacaban en justo equilibrio el número de instrumentos orquestales, un poco a la par con las sinfonías precedentes, aunque probando con una expresión más cercana al espíritu galante y con una pretensión más personal, aceptando que sus propuestas en este género, se había desarrollado con actitudes ciertamente distintas, pesaba entonces el asiduo compromiso de trabajos de compromiso, logrando aquí una reconocible tensión armónica, audaces intervalos, ritmos sincopados y un contrapunto más pronunciado, observando que bastantes de obras, destacan por el uso de tonalidades menores. El primer tiempo, Allegro con brio, se avanza con un forte unísono, que recuerda a otras de sus sinfonías, aspecto en el que también coincide con Mozart y que esta vez encuentra respuesta en una idea cantabile, para seguir con un tema que recurre a motivos anteriores, en el relativo Sol M., configurando con calculada impresión un clima de desarrollo que evoca paradigmas de su quehacer y que concede cauce para la entrada el segundo movimiento, el Minueto allegretto, sombra que responde al calificativo de Canone in Diapason, acuñado por el propio maestro por esa especie de respuesta trazada en forma de canon que pone barreras frente al tiempo anterior, dentro de una necesaria respuesta, con un trío en Mi M., remarcado por las cuerdas y la trompa en registro agudo. El Adagio, valdrá para que las cuerdas en sordina, destaquen sonoridades que nos recuerden a un pasaje del oratorio La Creación, con un acompañamiento de tresillos fluidos que recrean una situación de cierta inmovilidad anímica para trasladarnos al Finale  presto que se aferra a la determinante tonalidad en menor, rigurosamente monotemática, valiéndose de un unísono que nos lleva con determinación al Primer tiempo.

Luigi Maria Carlo Zenobio Cherubini (1760/1842)-Requiem en Do m. (à la mémoire de Louis XVI) -, se expresará en estilos de confluencia entre el barroco italiano y tendencias de C.W. Gluck, merced a las influencias aceptadas del compositor de la reforma meridiana en el mundo de la ópera, prestando atención al trazado de sus construcciones y la elegancia  de su vocalidad, en obras como Armida Abbandonata, Olimpiade o Médée, claridad en sus texturas y variedad en los recursos utilizados que en las obras sacras, alcanzarán una dimensión distinta. Compositor asentado en París, fue maestro relacionado con el mundo cortesano, recibiendo por ello el protagonismo relevante de asumir la dirección de la École de Musique de la Garde National (1792), espacio que se convertirá en el Conservatorio parisino, para continuar a partir de 1822, en titular vitalicio, cargo que ostentará con una particular actitud, que le traerá más de un conflicto y burlas entre sus colegas como sería el caso de Héctor Berlioz, autoridad por excelencia a ese período histórico. Fue la ópera un argumento para proyectarse socialmente, pero en el mismo no desechamos la música sacra, que va desde la serie de Misas: Messe de Chimay, a la Deuxieme Messe solennelle, la Troisième Messe solennelle…exécutée au sacré de S.M. le roi Charles X, abarcando en total a un centenar de obra que por encargo, se repartirán entre Bolonia, Milán o Florencia, obras que muestran la herencia vienesa de F.J. Haydn y Beethoven, que se entremezclan con las obras dedicadas para la escena, un creador un tanto al margen, por lo que muchas de sus obras no superaron lacriba del tiempo.

El Requiem en Do m (à la memoire de Louis XVI, para coro y orquesta, es obra encargo de 1816, consecuencia de su nombramiento como superintendente de Capilla, un trabajo en recuerdo de Luís XVI y que se estrenó el 21 de enero de 1817, en Saint-Denis, conmemorado  la fecha fatídica de la ejecución del monarca, alcanzado en esta obra el grado sumo de las obras destinadas a este género, y que volverá a escucharse en Viena dos años después y en Leipzig, en 1820. Se acepta que tanto Beethoven, como R. Schumann, Brahms o Verdi, apreciaron la calidad del Requiem, obra que dentro de este apartado, se mantendrá en catálogo. Los dos Requiem compuestos, mantienen similares estructuras, que se resuelven en siete tiempos. Introitus et Kyrie (Largo sostenuto, en Do m., muestra una ostentosa escritura polifónica muy recogida, arropada por un solo de violonchelo y fagotes, antes de que el coro y el resto de la orquesta se manifiesten en un pasaje en pianísimo, hasta llegar al Te decet hymnus y el final Exaudi orationem.  El Graduel (Andantino largo), tiempo más breve podrá recordar a Mozart desde las primeras palabras Requiem aeternam donna eis Domine et lux perpetua luceat, en un estilo de antífona y con una orquesta limitada a las cuerdas.  Diaes Irae ( Allegro maestoso), tiempo desarrollado en un continuo sin reposo, mostrando una entrada de metales Tuba mirum, hasta encumbrarse en el Rex tremendae, con respuesta en la llamada del Confutatis y en el Vocame cum benedictis, que se completa en el Lacrymosa, con un tema de tres notas dobles con el coro en pianissimo.   El Offertorium, denso tiempo en la tonalidad principal de Mi b M., parte de un Andante sobre brillantes sonoridades Domine Jesu Christie, rex gloriae, arropado por cuerdas en ritmos incisivos que se acentúan en el De poenis inferni y en Quam olim Abrahae, hacia el Hostias concentrado e íntimo.   Santus (Andante, en La b M.), luminoso y breve para resaltar el texto Benedictus  qui venit in nomine Domini, con respuesta  de la orquesta en plenitud.  Pie Jesu (larghetto, en Fa m.), resuelto en valores largos al tiempo lírico y meditativo, marcado por las oposiciones de las familias instrumentales. Cierra el Agnus Dei (sostenuto, en Do m.) que se impone por su enervación interna y su pasión dentro de una apreciable serenidad, que deja una sensación de emoción plena por el clima recreado, con la cadencia conclusiva en Do M., en un motivo pianissimo.

Ramón García Balado

Arxis Percussion Group y Evo Ensemble, Festival Resis en San Domingos de Bonaval

 San Domingos de Bonaval, Santiago de Compostela


El Festival Resis repite esta vez en San Domingos de Bonaval, en un programa tratado musicalmente por Arxis Percussión Group y el Evo Ensemble, que dirige Virginia  Guidi, para ofrecernos Consolation I, de Helmut Lachenmann y Karts, de Hugo Gómez- Chao Porta, obras en estreno- día 22, a las 19, 30 h. y el día 24, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid- contando con un trabajo coreográfico de Raquel Buj y una aportación de la creadora en artes vivas Victoria Aime, dentro de un espacio escénico propuesto por LaPharmaco, de Luz Arcas. Evo Ensemble está integrado por Victor Andrini, Michele Pellicani, Teresa Varelli, Felicita Brusoni, Eleonora Sussana, Melissa Aissatousylla, Vittoria, de Vicentiis, J. Gabriel Falla Obando, Edoardo de Vicentiis, Erwin dos Santos, Emmanuele Gizzi y Niccolo Paniguitti.   Ars Percussion Group, son Joâo  Miguel Braga, Carlota Cáceres, Yu Ling y David Collazo.

Raquel Buj, cuida del espacio escénico sobre una experimentación con biomateriales creados a partir de materiales naturales, desde resinas a piedras y otros imaginables que confeccionan una arquitectura de complejas texturas en cuanto a formas y volúmenes.  Armando Merino, director del espectáculo, probó experiencias con el Modern Ensemble, la International Ensemble Akademie, Impuls Festival, la Bayerischer Kunstörompreis (Baviera), la Staatskapelle Halle, la Deutech Sinphonie Berlin, la Bayerisches Staatsorchester, la ESMUC, con Jordi Mora, el Conservatorio della Svizzera (Suiza)- con Arturo Tamayo-, asistiendo a las docencias de Pierre Boulez, Pieter Rundel, Michael Luis o Pierre André Valadé. LaPhármaco, de Luz Arcas, formada en el Conservatorio Mª de Ávila de Madrid y en dirección escénica en la Real Escuela Superior de Arte Dramático, ostentan una trayectoria jalonada de espectáculos que han labrado una trayectoria prestigiada: Mariana, para los Teatro del Canal y la Scène National du Pays de Montbéliard (2022/3); Trilla, para el Museo Thuyssen Bornemisza (Málaga); Una gran emoción política, para el CDN; Toná, Festival de Otoño de Madrid y el Teatro de la Abadía (2020); Miserere, cuando la noche llegue se cubrirán con ella, inspirada en Elías Canetti (Masa y poder) y en René Girard,  (Teatros del Canal); Kaspar Hauser, el huérfano de Europa, también destinado al Festival de Otoño (2016) y colaboraciones operísticas: Rigoletto, para el Teatro Real, La Maestranza, Arriaga y la Ópera de Israel. Recibieron galardones como El Ojo Crítica de la Danza; Premio de Teatro Andaluz, Premio Max (2017) y el Premio Lorca. Perspectivas desde un flamenco transgresor y de complejo posicionamiento en lo relativo a sus propuestas escénicas.

Helmut Lachenmann- Consolation I-obra para 12 voces y cuatro percusionistas estrenada en Roma en un homenaje a dos compositores resultando una profunda reflexión sobre el tema de la voz humana y la experiencia física del sonido y sus diferentes transformaciones heredadas de la música concreta encuadras en un contexto instrumental, actitud de un compositor que procura buscar las reacciones del oyente  por su posicionamiento frente a la propia música y su poder de recepción, para el autor será una especie de simulación de la sociedad de nuestro tiempo, una sociedad fragmentada y alienada en un actitud que va enfocada no sólo contra los modos pasivos de escucha, sino contra la generación misma de los compositores que le preceden. Lachenmann pertenece a la oleada de músicos que suceden a aquellos que asumen las estéticas de signo rompedor de la época de posguerra, estudiando a compositores representativos de la primera vanguardia, Stockhausen y Luigi Nono, quien le influirá de manera determinante en modelos como Prometeo, con quien comparte sus directrices de comportamiento dentro de una ecuación entre la revolución musical y social. Donde Nono remite a documentos explícitos de denuncia, Lachenmann apuesta por la especulación interesándole los sonidos y sus posibilidades combinatorias de esta forma, medita la aproximación a los parámetros de la Música Concreta Instrumental, un discurso marcado por el ruido, aspecto que no hallaremos en Mauricio Kagel o  Schnebel, tratando esos ruidos de una manera analítica y estructural.

Karts, de Hugo Gómez-Chao, resulta una meditación sobre nuestro cuerpo al margen de etiquetas y disciplinas. Obra Materia vibrante de Jane Bennett, que sirve de inspiración y guía de posibilidades de reformulación que se presumen en nuestro cuerpo y los de nuestros inmediatos congéneres en una obligada convivencia, un aspecto determinante que repercute en esa dimensión artística y emocional que nos relaciona con la naturaleza en una propuesta musical para 12 voces y cuatro percusionistas y que remite a texto que van desde el De Rerum Natura, de Lucrecio, a los escritos sobre la naturaleza (Leonardo da Vinci), fragmentos de Ángel Valente o Jacques Lacan. Cinco movimientos en los que las voces emergen y se transforman como a cámara lenta en la que la palabra hablada y los textos cantados surgen poco a poco, apoyados por la sección instrumental que secunda el discurso que se presenta mediante la exploración de diversos materiales metálicos que se reparten entre bronces y latones y apuntes percusivos que se manifiestan al final  de la pieza, en un fundido manifiesto con las voces tendentes en un pasaje hasta el desvanecimiento y la oscuridad en una luz cegadora y ruidosa. Siempre nos queda de Hugo el recuerdo de obras como Sol, quizás o nada, encargo de la Fundación SGAE y AEOS, estrenada por la OSG, con Otto Tausk, entre el concierto para dos pianos de F.Poulenc- Lucas & Arthur Jussen- y la Sinfonía nº 1 , de J.Brahms, en Do m. Op. 68 o Schattenhaft, encargo de la RFG y con dirección de Baldur Brönnimann, obras que se añaden al Límites del negro, premiada por la Fundación SGAE-CNMD; Chanson de la plus haut tour, sobre poemas de Arthur Rimbaud, primera obra para orquesta; Vanitas vanitarum, obra para voz, guitarra, violín, chelo y que se basaba en un Florero de Juan de Arellano, en el Concierto 5 compositores para un Museo (2017), además de su presencia permanente en la evolución del  Festival Resis desde su primera cita, del que es cofundador con Ramón Otero, como director artístico, estrenando entonces El tiempo menos solo, obra en la que tomaba argumentos del poeta Abraham Gragera. Hugo Gómez-Chao Porta (1995), había estudiado con David del Puerto, ampliando posteriormente con Beat Furrer, en la Künstuniversität  Graz y con Clemens Gadentäter, Sergio Luque, Friedrich Haas y Jesús Rueda.

Ramón García Balado

19/05/2025

Baldur Brönnimann (En) Foco

 Días 15 y 16, de mayo, 2025


Concierto que completaba la serie (En)Foco  dirigida por Baldur Brönnimann, en el que fueron  protagonistas la violinista Amandine Beyer, artista en residencia de la temporada y el percusionista Juanjo Guillem, quien tuvo bajo su confianza Speaking Drums, de Peter Eötvös, además de tres piezas de la suite de King Arthur de Henry Purcell y la Suite para orquesta nº 3, en Re M. BWV 1068, de J.S. Bach, con Amandine Beyer como directora y solista.  (En) Foco no renunció a una página contemporánea, que para la ocasión fue Speaking Drums, de Peter Eötvös, protagonismo absoluto para Juanjo Guillem, en esta obra surgida como un encargo de la O. Filharmonique de Montecarlo, puesta en atriles por Andrey Boreyko y Daniel Ciampolini, pieza que reclama un especial protagonismo gestual en el que caben pasajes comentados que cobran valor en escena, en permanente disputa con la sección orquestal forzando un a modo de diálogo teatral. Eötvös (1944, Odorheiu Secuiesc, Hungría), es un compositor galardonado con el Premio Fronteras del Conocimiento BBVA, por su obra reivindicativa Alle vittime senza nome, trabajo de denuncia y en la urgencia de los acontecimientos cotidianos, composición que mantenía argumentos como los expuestos en Angels in America; el Oratorium balbulum o la ópera de gran aceptación El Balcón, sobre la obra de Jean Genet, que inauguró hace unas décadas el Festival de Aix-en-Provence, obra que observa una confluencia apreciable con la música hispana y sus distintas raíces. Juana Carneiro, directora de la O. Sinfónica Portuguesa y del Teatro Sâo Carlos de Lisboa, tan relacionada con la RFG, en sus actividades de temporada, había participado en el jurado que le concedió el Premio Fronteras del Conocimiento BBVA, resaltando en su personalidad la forma de encarar los retos de su tiempo experimentando con las formas acústicas, la tecnología, los espacios y los propios músicos, con un lenguaje afectivo y nuevo a la vez, con mucha creatividad y originalidad.  Eötvös, colaborador también del Klangforum Wien, es uno de los más  inquietos creadores del momento, aceptando las sugerencias recibidas de Pierre Boulez, y bajo su firma, bastantes de su proyectos nos llegaron a través de BMC, proyectos como Atlantis; Tres hermanas, tomando la dramaturgia de Chejov; Harakiri, con aproximación a las influencias japonesas; Tale, recurriendo a cantos tradicionales húngaros; Psychokosmos, o su Octeto, ofrecido en una convocatoria en nuestro país, dedicada a compositores- intérpretes, en la que coincidió con Fabián Panisello-Mandala- músico que tanta importancia tuvo en las citas recientes de las Xornadas de Música Contemporánea, con la JONDE FOCUS.

Tres espacios en Speaking Drums: Tanzlied/Dance Song; Nonsense Song y Passacaglia (Intrata- Saltarello-Bourré- Passepied- Gigue- Allemande y Finale), obra que se resuelve a través de los sonidos recreados sobre la poética del escritor Sándor Weöres (1913/89) y  la inspiración sánscrita del s- XII, de Jayadeva, en los que Juanjo Guillem se manejaba a sus anchas sobre el escenario, en cuanto a su desenvolvimiento escénico mientras abordaba el trato con un despliegue de instrumentos de percusión enfrentados al resto de la orquesta, obra excesiva y provocadora en la que como aliciente connotativo, su propia voz recalcaba pasajes hablados que enfatizaban las  rítmicas pretendidas.                                                                                                                                  


Amandine Beyer
, tan apreciada por sus colaboraciones ofrecidas desde  temporadas pasadas, con su grupo Gli Incogniti, redondeó los tres compromisos obligados como artista preferente en calidad de figura en residencia y que en este curso nos obsequió con dos veladas, una primera bajo el título de Los elementos, dedicada al repertorio  francés resuelto entre obras de Jean-Féry Rebel, Elisabeth Jacques de la Guerre, J.M. Leclair y J.P. Rameau y la siguiente con atención preferente a Mariannne von Martínez y Maddalena Lombardini. Beyer, puro arrebato y entusiasmo, siempre nos deja con el alma en vilo en cada una de sus apariciones y la de esta vez no iba a ser menos, ella ganadora de galardones como el Diapason d´Or o el Choc de l´année, curiosa aventurera por proyectos como el dedicado a la danza con Anne-Teresa de Keersmaeker, sobre repertorio bachiano, y la colaboración de alto riesgo a partir de las Sonatas del Rosario, de Biber. Destacando por sus labores docentes en la Schola Cantorum Basiliensis.  

Juanjo Guillem, especializado en aventuras vanguardistas sobre el espacio de las percusiones, mantiene proyectos con el Centro Katarina Gurska, siendo un maestro en estas materias que le llevaron a colaborar con la ONE, la Quincena Musical Donostiarra, Music  d´Aujourdui, la Escuela Reina Sofía, la Fundación Juan March, el CNDM, o formaciones como el Cuarteto Arditti, y el compositor Markus Stockhausen, Pierre Boulez, Ligeti, L. Berio, Hosokawa, Cerha, Tan Dum, S.Gubaidulina, Steve Reich, I. Xenakis o los españoles Mauricio Sotelo, J.Luís Turina y Sanchez- Verdú, ampliando perspectivas con la Manhattan School neoyorquina, el Conservatorio de Amsterdam, el Royal College o la Royal Ac, de Londres.

 Piezas de Henry Purcell  tomadas de King Arthur, abriendo con Curtain Tune on a Ground, para seguir con el Shepherds dúo y el Maestoso and hornpipe que nos ubicaba en su obra escénica Timon of Athen  repuesta en la primavera de 1695, tras su estreno en 1678 y que tendría excelente acogida en el Teatro Drury Lane, tomando como argumento un texto de William Shakespeare, conservando desde su presentación una notable popularidad. Una etapa en la que también verá la luz otra de sus obras señeras The Indian Queen. La obra que nos afectaba, conocería un cambio en el final debido a Shadwell, quien le añadiría una mascarada que comportaría importantes cambios.  Otra suite procedente de King Arthur, semiópera dramática tomando un texto de John Dryden y estrenada en 1691, obra que por su características se distancia de tantas otras semióperas que no pasaban de ser adaptaciones sobre textos anteriores a las que se añadían números musicales-The Fairy Queen-, y que en esta ocasión, estaría pensada como un perfecto equilibrio entre palabra y música, siguiendo la tendencia del teatro inglés de la época. Poco guarda en común con el ciclo artúrico y sus sucesores, integrando números musicales dentro de la trama que al margen de interrumpirla, avanza junto a ella. La suite cumple como un acorde destilado que ayuda a inmiscuirse en el imaginario sonoro purcelliano, como encontramos en otras habituales suites. Curiosamente y para el concierto, un comienzo de la suite enlazada en su escucha con el final de la obra de Eötvös, mientras se retiraba del escenario toda la artillería percusiva para proseguir con la sesión de forma relajada y natural confirmando la idoneidad propuesta por el director Baldur Brönnimann.

Para mantenernos en estos barroquismo, la Suite para orquesta nº 3, en Re M. BWV 1068, de Johann Sebastian Bach, que  como cierre, esta suite encuadrada en la serie de cuatro conocidas habitualmente como Oberturas, merced al protagonismo del Primer tiempo, aunque al parecer no fueron compuestas con la pretensión de formar un ciclo ya que no conservamos ningún manuscrito autógrafo que lo confirme, siendo en conjunto una serie de copias que se encuadran en este apartado de las Suites 1066-69, con seguridad podrán caber en el compendio de obligados compromisos para Köthen y en lo relativo a la que se nos ofreció, destacó por implantación de la flauta travesera como instrumento solista, además del mayor desarrollo del estilo de obertura alla francesa. La Suite nº 3, en Re M. BWV 1068, reducía a cinco sus movimientos, permitiendo una estructura más clara a partir de su Obertura manifestando su notable energía auspiciada por la presencia de tres trompetas, un par de oboes y los timbales. En otra clave se ponía en ciertas urgencias el tema del protagonismo de los solos de violín. En el planteamiento  estilístico, destacaban el Air; las Gavottes I y II; la Bourrée y la Gigue, en su forma a la francesa, danzas características elegantes y sutiles perfectamente asimilables al medio escénico, Queda en el ambiente y dentro de este grupo, una supuesta quinta Obertura, que sería atribuida a su hijo Wilhelm Friedemann.

Ramón García Balado

Amandine Beyer. Juanjo Guillem. Real Filharmonía de Galicia/ Baldur Brönnimann

Obras de H. Purcell, Peter Eötvös y J. S. Bach

Centro Cultural Afundación, Vigo

Auditorio de Galicia, Santiago de Compostela

18/05/2025

Taller Sonoro, para completar Contemporáneas

 Sala Mozart, Auditorio de Galicia, Santiago de Compostela


Ocho fueron los conciertos que integraron el Ciclo Contemporáneas a lo largo de un período extenso que nos llevó desde octubre a esta cita en la Sala Mozart del Auditorio de Galicia, esta vez con Taller Sonoro- día 20, a las 20´30 h., una agrupación integrada por Jesús Sánchez Valladares- flauta-; Camilo Irizo-clarinete-; Baldomero Torres-percusión-; Ignacio Torner- piano-, Alejandro Tuñón-violín- y Carmen Coronado, como chelista. Veníamos de una primera propuesta con Arxis Ensemble, con el reclamo de una obra tan emblemática como La fabbrica iluminata, de Luigi Nono, entre otras dos que respondían el trazado que lo que sería el conjunto de Contemporáneas, aquella obra nacida al amparo de textos de Giuliano Scabia y un fragmento de Du poésie a T, de Cesare Pavese, para voz de soprano con apoyo de cinta magnética y registros pregrabados en la fábrica de Cornigliano, con procesamiento en el Studio di Fonología de Mariano Zuccheri, siendo la soprano Adriana Aranda. Ciclos como el actual fueron costumbre dentro de proyectos de durante temporadas, cubrieron en el CGAC, dos formaciones estables, el TAC, de Diego García y Vertixe Sonora Ensemble, un colectivo al que Ramón Souto dio cauce a partir de 2010 y cuya tarjeta de visita había sido el documental Correspondencias Sonoras.

Contos para arrolar un enxame, encabeza el reclamo de la propuesta que incluye obras de Nuria Núñez, Elena Mendoza , Lula Romero y Clara Iannotta. Taller Sonoro surgió en el año 2000, siempre dedicado a temáticas contemporáneas, en principio en Andalucía para incorporarse a las temporadas del CDNM, el Museo de Arte Reina Sofía, los Teatros del Canal (Madrid), Alicante, el Teatre del Liceu, L´Auditori (Barcelona), Ciclos BBVA, Fundación Juan March, Palau des Arts (Valencia), Festival Klem (Bilbao) o la Universidad Menéndez y Pelayo (Santander). Fue formación residente en el Auditorio Marcel Landowski (París); Hochschule für Musik (Frankfurt am Mein); Instituto Cervantes (Berlín); Fest. KGNM (Koln); Teatre Quartz (Brest); Wien Musikverein; Forum Wallis (Suiza) y otras convocatorias señeras que se ofrecen en distintos países latinoamericanos.  Se añade también su colaboración con formaciones de música antigua como Organum Ensemble (Macel Péres) o el Ensemble Gilles Binchois (D. Veillard), y compositores actuales como J. Mª Sánchez- Verdú, David del Puerto- que en este ciclo ofreció su ópera A solas con Marilyn, con Teatro Xtremo-, o César Camarero.

Nuria Núñez, se especializó en tendencias integradas en técnicas extendidas, propuestas que tientan a bastantes compositores actuales en los frentes más diversos, desde la voz a los recursos instrumentales , ya desde sus comienzos en Córdoba como paso previo a la Universität der Kunste Berlin y el Centro de Estudios Avanzados de Berlín (BAS)- Graduirtenschule UdK-. Recibió el reconocimiento de la Escuela Reina Sofía; la Fundación Autor, la JONDE, Thüringer Landesmusikakademie (Sondershausen) y otras entidades de primer rango. Siempre en esta alternativa de indagación entre nuevos públicos, se implica en proyectos que se proponen en calidad de compositora en residencia, en proyectos como Rapauke mach Musik (Berlin Rundfunck Radio), con óperas dedicadas a jóvenes curiosos, entre las que destacan La Isla (video-ópera); El sueño del señor Rodari (para teatro de sombras), destinada a la Academia España (Roma); Bestiarum (espectáculo interactivo),  a medias con Fundaciones como Haus der Kulturen del Welt o la Volksbühne Berlin o Kleines Stück Himmel, un encargo de la Deutsche Oper Berlin. Las piezas elegidas, serán Alla ricerca disperata del sole; Cartografías efímeras  y el añadido de un estreno absoluto para este concierto con Taller Sonoro.

Para completar programa, Lula Romero- Autonomous realities- compositora que dedicó atención preferente  a géneros actuales  siempre a tenor de invitaciones recibidas de festivales que la llevan desde nuestro país a visitas que se reparten entre Europa y los Estados Unidos. Es licenciada en Composición e Historia del Arte  con fundamentos en el Conservatorio Manuel Castillo (Sevilla) y grado superior en el Conservatorio de La Haya, preparando su doctoramiento en Graz (Austria). La electroacústica es uno de los espacios de investigación sonora, ampliando en profundidad en los aspectos especialmente técnicos.

Elena Mendoza, compositora especialmente activa- Die Macht der Gewöhnheit (2014)- fue la primera compositora en obtener el Premio Nacional de Música (2010), convirtiéndose en un referente que la mantiene como figura a nivel nacional, compaginado con otras actividades dentro de las artes escénicas, por esa capacidad de investigación y que se manifiesta por una capacidad de poner en cuestionamiento la realidad cotidiana. El estímulo de las artes escénicas fue inherente al desarrollo de su obra en su conjunto por su relación con cantantes y actores en ese proceso asociativo con maestros como Matthias Rebstock, con el que trabajó con obras como Niebla (2007), en la Europäisches Zentrum der Künste Dresden Hellerau, a la  que seguirían La ciudad de las mentiras, sobre la poética de Juan Carlos Onetti, un encargo de quien tan buena impresión había dejado en el Teatro Real, Gerard Montier (2017) y el culmen que supondrá Der Fall Babel, para el Festival de Schwetzinger, de dos años después.

Clara Inanotta- Il colore dell´ombra-, otro ejemplo y modelo de inspiración en estas opciones, perfeccionará los recursos que tome como argumento, siempre cuidando las posibilidades de los mismos recursos teatrales en lo relativo al estímulo musical y las peculiaridades del sonido, en el permanente dinamismo que permanentemente ayude a descubrirnos su espacio creativo, unas partituras plagadas de detallas instrucciones técnicas a las que se añaden la serie de objetos más insospechados, muy presentes en estas posibilidades de las técnicas extendidas. Un factor de detallismo que contribuye a enriquecer la paleta sonora en los registros más insospechados, dejándose inspirar por las impresiones auditivas en permanente evolución de propuestas. En resumen, un oído atento para precisar la serie de sonidos en sus inabarcables precisiones sorprendentes y complejas.

Ramón García Balado

Da trisca as praterías

  Praza das Praterías. Santiago de Compostela Concierto de la Banda Municipal en As Praterías - día 5, a las 20´00, con su titular Casiano...