24/04/2024

Concierto de cámara de la CAEO: Mendelssohn y Kaija Saariaho

 Sala Mozart, Auditorio de Galicia

Concierto el pasado miércoles de las actividades de la EAEM a cargo de alumnos de las aulas de la violinista Ildikó Oltai y del  contrabajista Carlos Méndez, quien también ocupó plaza como intérprete entre ellos, destacando la colaboración de Eriko Ishimoto en acompañamiento de piano y  celesta. Un reparto en programa por épocas y estilos con una atención preferente a quien a sido una de las compositoras de mayor atractivo del curso, la finlandesa Kaija Saariaho, de la que escuchamos obras como Ciel d´Hiver; D´om le vrai sense, un concierto para clarinete del que fue protagonista Kari Kriiku, del que era dedicatario y en el que alumnos de la EAEM, reforzaron la plantilla de la RFG, sesión en la que también, se ofreció  Variaciones op. 42, de Erich W. Korngold y la Segunda Sinfonía de Kurt Weill. Alumnos de la EAEM, suelen acompañarnos en los conciertos de temporada, como el vistoso ofrecido por el intérprete de sheng, Wu Wei, con la obra de encargo The Colour Yellow for Sheng and orchestra, de Huang Ruo, encargo de la RFG y la Euskadiko Orkestra, y el estreno igualmente de  Oiartzun gorriak (Ecos rojizos) de Itziar Viloria. La EAEM, tendrá pendiente para la clausura de temporada, el concierto que dirigirá Baldur Brönnimann, con la violinista Rosanne Philippens, para ofrecernos el Concierto para  violín en Re M. Op. 35, de Erich W.Korngold; Atlas eclípticas, de John Cage y la Sinfonía en 3 movimientos de Igor Stravinski.

F.Mendelssohn, el clásico-romántico, fue objeto de atención por una obra de sus años jóvenes, el Octeto para cuatro violines, dos violas y dos chelos, en Mi b M. op. 20, obra nacida en un período apacible por su estancia en el Palacio Recksech, y que lograría reunir a dotados melómanos del momento. Obra acorde para este programa desde la frescura y elegancia del Allegro moderato ma con fuoco, a pesar de que no se conoce cualquier ejecución pública de esta obra camerística antes de su presentación del dirigido por Baillot, en el Conservatorio parisino en la primavera de 1832. El diálogo entre los distintos instrumentos a lo largo de este tiempo, nos abocaba a un breve desarrollo que se completaría en un crescendo camino de una reexposición sencilla y una coda ostentosa. El Andante, según el patrón, pretendía recrear una balada medieval, tentación del autor por acercarse a esos estilismos ancestrales, dentro de una ambientación melancólica a partir de un aire de siciliana. El Scherzo ( Allegro leggierisimo, para redondear una ambientación propicia, remite a  la poética de Goethe en el Fausto, en los últimos pasajes de La noche de Walpurgis, que el compositor recuperará para una obra posterior. Un Scherzo mágico sobre un extenso desarrollo que tentará a Mendelssohn, para una orquestación que incluirá en la Sinfonía en Do m. Op. 11, que estrenará en Londres, desplazando al minuetto. El Presto, un ejercicio novedoso y una recreación casi jocosa, parece acercarnos al mundo mozartiano, nada extraño vistas las afinidades presumibles entre ambos compositores. El juego de contrapuntos quedará como una gratificante resolución colectiva, en una obra perfecta para estos programas de aportación colectiva, que en su momento llegó a escucharse tanto en recinto sacro como en la mítica Gewandhaus, de Leipzig.  

Kaija Saariaho, en una obra de sus últimos meses de vida, Semafore, compromiso para el Carnegie Hall y el Santa Fe Camera Festival, con motivo de su quincuagésimo aniversario. Obra que alcanza aproximadamente un cuarto de hora pero de notables exigencias para los intérpretes, detalle que descubrimos en composiciones camerísticas como Maa; Du cristal…à la fumé, destinada al Kronos Quartett; los Jardines privados; New Gates; Solar o Champs d´action. Sus propias palabras servirían para entendernos con Semafore, quien responderá a la pregunta sobre la importancia de temas evocadores, la distancia  y la comunicación. Cuando uno ha vivido   mucho tiempo lejos de su propia cultura, siempre hay un regusto de nostalgia y al llegar a nuevos lugares como un extraño, uno se acostumbra a mirar las cosas desde fuera. En términos de sonido, dedica tiempo sobrado al cuidado de construir ciertas texturas y colores específicos, tal cual si tuviera de antemano una idea o una impresión de sonidos. Siempre tuvo ideas precisas de esos sonidos aspirando a que los oyentes les escuchen como un elemento de investigación fascinante. Una impresión que por las obras seguidas esta temporada, no viene más que a confirmarse y para delectación, esta obra elegida por alumnos de la EAEM. Obra perfilada tras la composición de Vista, y que por su planteamiento pone en duda algunos detalles técnicos de su acostumbrado quehacer, el caso de las octavas distante del habitual en otras obras, las intensidades o las tensiones armónicas y las dinámicas. Una música que sabrá alterarse por los cambios de carácter y regularidad métrica. Semafore, remite al finés Ernst Mether-Borgström, autor de un conjunto de obras artísticas que la tentó desde su juventud en cuanto a sus pinturas en las que recrea ese mundo cotidiano de la urbe como una jungla.

Ramón García Balado

 

Ningún comentario:

Publicar un comentario

Comienzo de curso en el CMUS, con la actuación de Isabel Rei Samartim, Carmen Ferreiro y Miguel Vizoso

  Conservatorio Profesional de Música de Santiago de Compostela Heitor Villa-Lobos   Actividad de apertura del curso en el CMUS, con un con...