Teatro Principal, Santiago de Compostela
Concierto de la Banda Municipal con directora invitada, Celia Torá Mateo y la participación en la matinal de Paula Cereixo y Monti Castiñeiras en el Teatro Principal- día 3, a las 12´00 h-,para un programa que destaca dos obras, una de valor reivindicativo Oscar for Amnestry, de Dirk Brosse y Los cuadros para una exposición de Modesto Mussorgsky. Celia Torá Mateo se formó como fagotista en el Conservatorio de Murcia con Vicente Navarro, ampliando conocimientos en el Conservatorio Manuel Mascati Littel. Pronto sintió el interés por la dirección, especialidad que compagina con la de solista de fagot, para lo que se especializará en el Conservatorio Superior de Murcia con M. J. Rodilla y Luís Padrón, punto de encuentro hacia quien será su maestro por excelencia J.Rafael Pasqual-Vilaplana, en Spilimberg (Italia), además de completar con Robert Treviño (O.N. de Euzkadi); Miguel Romea (O. Verum, de Madrid y Cristóbal Soler (Ac. AIDO). Ejerció como directora de la Banda Valle Albaida (Alicante) y participo en la gerencia del Teatro de La Zarzuela, de Madrid. Entre otras actividades como directora artista, la encontramos en las actividades del Festival en Escala; el Concurso del Fraile (Hondón de Los Frailes) o el Concurso Ginés Noellán (Santomera). Con ella, estarán la actriz Paula Cereixo, Premio Mestre Mateo de 2020, apreciada por sus cualidades en Arte Dramático, entre serie televisivas y obras de teatro: Esperando a Godot (Samuel Bekett) o la serie A Estiba. Monti Castiñeiras, también Premio Mestre Mateo, fue reconocido por sus varias propuestas y nominaciones para el mismo. Activo por su protagonismo en serie y filmes, tuvo relevancia en títulos como Serramoura, Mareas Vivas o Libro de familia.
Dirk Brossé, compositor y director belga, comenzó sus actividades con la O. C. de Filadelfia y en el Festival Musical de Gante. Fue profesor de la Arts School Royal Gante y pasó sucesivamente en labores directoriales con la London S.O.; la Orchestre de Lyon; la O. de la Suisse Romande; las de Birmingham, Liverpool o Glasgow, Rotterdam y Basilea. Relevancia había tenido su concierto ofrecido en el Royal Albert Hall (2008), en la velada de gran despliegue por la selección de obras de John Williams. Recibió el Premio EMMY BBC/HBO, por su obra Parade, composición que se añade a otras que le permitieron cierta popularidad: Prince of Africa; Daens; Sacco & Vanzetti; Tintin; Rembrant o Pauline & Poulette y Scrooge. John Williams, se interesó por su trabajo, animándole a colaborar con él en proyectos y actividades y para ejemplo, Stars Wars in Concert World Tour (2009). Con la London S. O., tendrá otro momento de gloria en 2018, en otro concierto de notable aceptación, con un programa que se repartía entre conocidos números musicales desde Jurasik Park a Star Wars, Encounters of the Thrid Kind y Schindler´s List. En este reparto de proyectos, destaca su labor como director de The World Soundtrack Accademy, de Gante, y entre sus iniciativas, merecen mención las colaboraciones con artistas como José vam Dam, Barbara Endricks, Julia Migenes, Sabine Meyer, Julian Lloyd Weberm Elmer Bernsteins, Michel Legrand o Toots Thielemans.
Oscar for Amnestry, obra basada en la poética de Marianella García Vilas, recurre a un texto en español que se inicia con la cita: Marianella es mi nombre/Mi nombre es la palabra/que nazca la palabra…, composición para orquesta sinfónica y voz femenina, que entre la evolución de la pieza, intercala partes de ese texto poético, en esencia la reivindicación de esa América Latina castigada por guerras y pronunciamientos despiadados y que en esta ocasión nos lleva a El Salvador, con el testimonio de una luchadora como fue Marianella García Vilas (1948/83), en esa defensa de los drechos humanos. Oscar for Amnestry, fue abordada por el maestro Pasqual Vilaplana, en un concierto ofrecido con recursos apropiados para su presentación y para aquella sesión, contaría con la Banda Sinfónica de Jaén.
Modesto Moussorgsky nunca estará de más con esos Cuadros para una exposición, en transcripción para banda, obra que ya pudimos escuchar en las programaciones de temporada de nuestras orquestas. La obra de gran reclamo, había sido producto de la asistencia del autor a una exposición de dibujos y maquetas, cuyo resultado será un trabajo que logró inmediata celebridad desde sus posibilidades para el piano o la orquestación acertada de Maurice Ravel. Una obra que a la postre no dejará de tener entusiastas y curiosos por acercarse a ella, precisamente en el tema de la orquestación, aunque definitivamente acabará por imponerse la de Ravel. Se traerá al recuerdo alguna como la de Touchmalov (1891), precisamente la primera en probar con obsesivo intento de fijar un patrón, finalmente sin llegar a lograr el éxito pretendido; también la de Leonidas Leonardi, ya en 1924, manejándose a su manera en la trasposición de las piezas a gusto del arreglista y que no logrará tampoco un gran predicamento, para seguir con la de Serguei Gortchakov, en 1955 o la del maestro siempre admirado Vladimir Ashkenazy, de 1983, otros podrán venir que aprueben en nuevas tentativas.
Ramón García Balado